Los que leéis mis pensamientos desde hace tiempo conocéis que comencé esta sección dedicada a los artistas vivos hace relativamente poco, cuando hablé de Jesús Martiartu y su mundo de sueños.
Hace ya tiempo que quería escribir sobre este artista, os contaré el porqué, y cuando veáis el trabajo al que dedica su vida, su ilusión y entusiasmo me entenderéis perfectamente. Pongámosle cara al artista
A Cris le conocí en persona durante el transcurso del almuerzo al que Carla Royo Villanova tuvo la deferencia de convidarme el pasado mes de marzo en las Pocholas del Retiro. Su personalidad me atrapó desde el minuto cero. Es de esos hombres vitales, llenos de una alegría contagiosa, al lado del cual te sientes cómoda desde el principio.
Nacido en 1955, empezó durante la década de los 80 a dedicarse al mundo de la pintura decorativa, trabajando tanto en proyectos europeos como allende los mares, en Estados Unidos. Tiene además una especial sensibilidad en el mundo del interiorismo. Si visitáis Boro Maré entenderéis lo que digo. Boro Maré no es una tienda cualquiera. Es como entrar en un exclusivo espacio donde el arte, la moda y el diseño se dan la mano en una fusión alquímica perfecta.
En la imagen superior el logo de la tienda, en la inferior una imagen de este espacio, con la obra de Cris en las paredes. De espaldas su alter ego y esposa Lola. Ambos convierten su tienda en un recinto mágico.
Una de las señas de identidad de Cris es su humildad, que le lleva a autodefinirse como artesano, no como artista. Ahí lamento discrepar. Un artista es aquel que dota a su obra de algo que la hace única, y ese algo es a veces intangible, pero que se sabe que está ahí. En su obra esto se percibe desde el principio.
Versátil y polifacético, se adapta como un guante a la mano del que le encarga o bien decorar alguna estancia de un hotel, o alguna habitación de su casa particular.
Para ello su imaginario particular se puebla de trampantojos realizados a partir de imágenes clásicas, dotadas de una impecable factura
Estas dos impresionantes imágenes nos sirven como muestra. Como uno de los artistas del renacimiento, que lo mismo decoraban las Villas italianas de los aristócratas, como pintaban cuadros de caballete, Cris traspasa esa costumbre humanista al siglo XXI realizando estas obras de interior, pintura de caballete, y diseño de muebles.
Uno de los referentes a quien siempre hace alusión es el pintor hiperrealista César Galicia, que es otro de los santos de mi devoción, artísticamente hablando
Obra del hiperrealismo conceptual de César Galicia.
Ahora compartiré las obras de Cris, el alumno está a la altura del maestro.
Lo figurativo y lo real se dan cita en una poética pictórica enormemente personal, que hace que cualquiera quiera tener una de estas obras colgadas en el salón de su casa. ¿Véis la mosca del paquete que se está rasgando en la pintura superior? Es un guiño de espontaneidad del artista.
También realiza obras vinculadas a una estética más pop, que son enormemente expresivas, veamos unas muestras
Norit el borreguito, Michelín, Milú y su hueso, todo un homenaje al mundo de hoy en obras decorativas y llenas de encanto
En cuanto a su faceta de diseñador de muebles ha diseñado unas mesitas auxiliares con señales de tráfico que realiza el que me parecieron geniales.
Prohibido entrar en la mesita superior, debajo, un juego de mesitas auxiliares «para no perder el tiempo»
La última vez que le vi estaba terminando un maravilloso cuadro del motor de un coche, al modo que pintaban los futuristas como Kupka, homenaje a la modernidad y a sus máquinas. Creédme, una absoluta maravilla.
Yo le deseo toda la suerte que se merece. Os dejo al finalizar mi post un link con la dirección de Boro Maré, donde podéis poneros en contacto con él.
Espero que os haya resultado interesante. Le deseamos a Cris muchos éxitos, y que nosotros podamos verlos.
Boro Maré está en Luchana 34, 28010 Madrid.