HELGA DE ALVEAR. UNA COLECCIONISTA CONTEMPORÁNEA

El otro día estuve en el Espacio Expositivo de CentroCentro, el actual Ayuntamiento de Madrid, que se ha lanzado a la carrera de conquistar un lugar preeminente dentro del panorama artístico-cultural de Madrid, y que fué inaugurado con la gran exposición el Legado de la Casa de Alba el pasado año, con inmejorables resultados.

A la muestra de la coleccion de Helga de Alvear acudía presa de la expectación, y del escepticismo que siempre me producen las muestras que se componen básicamente de instalaciones. Helga de Alvear 002

Instalación a base de zapatillas de deporte almacenadas. ¿Hablando del culto al deporte? No se sabe.

 

¿Qué es coleccionar? Pues es seleccionar, recopilar, emocionarse…llegar a obsesionarse, y no tener miedo a equivocarse…todo ello forma parte de los requisitos indispensables del buen coleccionista.

Yo coleccionaría a buen seguro obras de Brueghel el Viejo, de Claudio de Lorena, de cualquier prerrafaelita, y por supuesto Constable…entre muchos otros que forman parte de mis confesas debilidades…desafortunadamente no están a mi alcance, una lástima.

Ella lo hace con el Arte del presente, que es como se llama la exposición. En ella ha querido dejar patentes sus vivencias, y cómo ha sido su aproximación al fenómeno del arte contemporáneo.

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Crear para destruir. Lo efímero del arte y de la gloria que este proporciona.

 

Lo primero que te recibe al traspasar la puerta son una serie de pantallas de televisión en las que aparecen secuencias de bocas mascando chicle.

Llama la atención la enorme heterogeneidad de Alvear a la hora de elegir las obras, que corresponden a múltiples técnicas y soportes y a artistas de muy variopintas tendencias, con un nulo hilo conductor que los vincule. Si queremos buscar uno sería quizá el cuestionamiento que hacen a través de sus obras del tiempo que les ha tocado vivir, su realidad sociocultural o sus mundos personales, a modo de microcosmos. Hay muchas fotografías del controvertido disidente Ai Weiwei.

En cada sala te introduces en un universo diferente, en el que las obras que lo integran parecen entablar un diálogo entre ellas,intentando insinuar temáticas y situaciones que «encierran» cuestiones de este mundo.

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Luces de colores

Llama poderosamente la atención la poética expositiva que ha escogido, y que hace que disfrutes de lo que ves, aunque no comprendas del todo lo que significan algunas de las representaciones, o las pulsiones más íntimas del artista a la hora de realizarlas.

Se observa un caleidoscopio de tendencias de artistas de diversas procedencias, y obra de autores consagrados como esta curiosa escultura doble de Juan Muñoz, que hace un homenaje al barroco con el espejo, y cuyas figuras así dispuestas son una muestra de la incomunicación del hombre contemporáneoHelga de Alvear 005

Un barco lleno de mantas y almohadones atraviesa un mar de vodka.

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Una forma diferente y original de dar el pistoletazo de salida al curso artístico!