Esta mañana me he enterado leyendo las efemérides de que hoy se celebraba el aniversario del nacimiento del escultor pamplonica Pablo Serrano. Como no podía ser de otro modo en seguida se ha aparecido en mi mente el grupo del que formó parte en un momento crucial para la historia del arte en nuestro país, a saber: el grupo El Paso.
La aparición de este grupo fué trascendental en una España sumida en el aislacionismo, inmersa en una calamitosa situación de posguerra, y donde ya habían comenzado a producirse las primeras «fugas de cerebros» sobre todo al país de las oportunidades, Norteamérica.
Hay que caer en cuenta de que la abstracción fué un fenómeno necesario en las artes. Cada vez cobra más importancia el continente de la obra de arte, su soporte, y la materia de la que está hecha.
El padre de la abstracción en España podríamos decir que fué el conquense Gustavo Torner. Nunca se adscribió al grupo, pero merece la pena dedicarle un pequeño homenaje. He aquí una de sus esculturas
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La sociedad artística en la que irrumpe el grupo El PASO fue definida en su manifiesto fundacional, publicado en 1957. Una vanguardia libre nacía después de dos décadas de silencio creativo y lo hacía con una idea clara de compromiso con su tiempo. Querían significar ese paso necesario de la tradición a la modernidad.
Bebiendo en fuentes como el expresionismo abstracto americano, con la «action painting» de Pollock o la «colour field painting»de Rothko, o el art autre de Dubuffet, de cuyas fuentes bebieron durante sus viajes a París. Así propugnaron una metodología del arte radicalmente nueva, rupturista, transgresora, y enormemente vibrante.
Rothko ante una de sus obras
Su principal medio de expresión: la pincelada violenta y empastada, el arañazo al lienzo, el dripping, el empleo de la arpillera, la tela metálica, la arena, los objetos pegados… Pero quizá el elemento definitorio del grupo fue el compromiso: una actitud ética, moral y social que convertiría el lienzo en un campo de batalla.
Pollock y su dripping en pleno proceso creativo.
Demos una breve pincelada a cada una de estas personalidades, que siempre incidieron en la utilización de materiales humildes, y en su absoluta falta de interés en que sus obras perdurasen en el tiempo. Menos mal que esto último no lo consiguieron. Nos hubieran privado de estas personalísimas obras.
El Manifiesto lo firmaron : Rafael Canogar, Martín Chirino, Luis Feito, Manuel Millares, Manuel Rivera, Pablo Serrano, Antonio Saura, Juana Francés o Manuel Viola entre otros.
Manuel Millares, canario de nacimiento, durante su época abstracta realizaba sus obras con sacos agujereados, tela de arpillera y cuerdas en las que pegaba objetos sacados de la basura. Los materiales citados eran luego cubiertos con capas chorreantes de pintura. E voilà, este es el resultado:
Luis Feito
La pintura de Feito esta influida por el automatismo, con superficies matéricas en colores blancos, negros y ocres, realizadas con mezcla de óleo y arena. A veces nos parece estar observando meteoritos a punto de colisionar contra el suelo.
Rafael Canogar
Usó inicialmente un técnica escultopictórica, los límites entre escultura y pintura se hallaban cada vez más difusos; con sus manos arañaba o exprimía la pasta que hacía vibrar sobre fondos de colores planos. Era una pintura en la que el gesto inicial sale directamente del corazón. En este punto Canogar encarnó lo mejor de la pintura matérica.
Manuel Rivera
El genial artista canario fué uno de los más innovadores: incorpora la tela metálica a sus obras como soporte artístico, primero sobre bastidores de madera y posteriormente de aluminio.
» Compré un rollo de tela metálica, lo llevé al estudio, lo contemplé durante días, y casi a ciegas comencé a trabajar sobre él. En ese momento comenzó mi aventura».
De la superposición de diversas placas de tela metálica, y su paciente plegado, se derivaban mágicas sensaciones, como si se estuviera contemplando una delicada tela de moaré.
Antonio Saura
Fué una de las figuras más fascinantes del grupo. Artista de enorme proyección internacional se adscribió al paso tras una etapa surrealista. Comenzó sus pinturas que él mismo bautizó como «fenómenos y grattages» La influencia que ejerció sobre él la pintura de Pollock es notable, pese a que él nunca abandonó del todo la figuración. Su conflicto fué con la forma. Sus cuadros son expresivos y dan la impresión de ser obsesivos en su franqueza pictórica.
Uno de sus famoso crucificados.
Juana Francés
La única mujer que formó parte del grupo navega indistintamente entre la abstracción y la figuración, entendiéndose de manera complementaria
«la abstracción y la figuración, en sí mismas no comportan una tendencia, una idea, ni una actitud, sino un medio, un vehículo, y una forma de desarrollar una tendencia»
La artista en acción.
Martín Chirino
Cofundador del movimiento, el trabajo de su padre en los astilleros le familiariza con el hierro y la forja. Uno de sus motivos más recurrentes será la espiral. Retuerce el hierro hasta sacar de su entraña toda la expresividad posible.
«La imaginación es potente y te ayuda a vivir, porque si miras la realidad estás perdido»
Pablo Serrano
Curiosamente he dejado casi para el final el artífice de este post de hoy. Realizó innovadoras y radicales experiencias sobre el volumen y el vacío. buena muestra la tenemos en su escultura del Museo de Arte Público, situado bajo un puente en el Paseo de la Castellana.
¿Os habéis percatado? De la unión entre realidades y poéticas creativas tan dispares se crea una realidad poliédrica, vibrante, llena de vitalidad. Fué necesaria la creación de este grupo, que nació sin pretensiones, pero del que nos podemos sentir muy orgullosos, para que se hiciera presente en nuestro país la renovación creativa y artística, que fué la que posibilitó nuestra madurez .
Confío que os haya gustado!